¿COMUNICAR CON EL PASTOR?

¿Necesitas comunicarte con el pastor de la iglesia? Puedes contactar con el Pastor Diego López en el email diego@cvalzira.com. Recibe el contacto personalmente. ¡Estamos para servirte!

HORARIOS LOS DOMINGOS

DOMINGOS 11:00 H.: ESTUDIO BÍBLICO

DOMINGOS 12:00 H.: CULTO DE ADORACIÓN Y ALABANZA

DOMINGOS 13:00 H.: REPARTO DE COMIDA Y ROPA

MIERCOLES 19:00 H.: REUNION DE ORACIÓN


Iglesia Evangélica Bautista - Comunidad Camino Vida de Alzira.
Av. Padre Pompilio, 5, ALZIRA

HECHOS, Y NO SIMPLES PALABRAS

Colosenses 4:2-6 dice
"2 Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias;
3 orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso,
4 para que lo manifieste como debo hablar.
5 Andad sabiamente para con los de afuera, redimiendo el tiempo.
6 Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno.
"

Una cosas son los hechos y otras las palabras. Una cosa es predicar y otra "dar trigo". Nosotros manifestamos nuestra fe, pero debe ir acompañada de unos hechos que la demuestren, porque sin ellos, nuestra fe sería carente de contenido, o meras palabras.

Pablo nos da unas pautas en este pasaje de Colosenses del que podemos sacar varias enseñanzas:

1. ORACION PERSISTENTE U "HORAS DE ORACIÓN"
Todos vivimos estresados y preocupados por nuestra vida. Cuando no es un problema es otro.
También tenemos necesidades reales que nos cargan la vida y pueden incluso enfermarnos.
La única forma de quitarnos las preocupaciones y necesidades es aceptando la solución que Dios nos ofrece, y eso pasa por acercarse a Él y aceptar su voluntad de todo corazón. Te ayudará, si es necesario pasar horas de oración.
Somos seres relacionales. Estamos hechos para relacionarnos, y hemos sido hechos a imagen y semejanza de Dios.
No te imaginas el deseo de Dios por relacionarse con nosotros. Dios quiere por encima de todo estar con nosotros y hablar juntos, porque nos ama. Sencilla y llanamente nos ama y quiere estar con nosotros.
La obediencia a Dios es por nuestro bien, y siempre hay que obedecer a Dios en todo, pero Él por encima de todo nos ama y quiere estar con nosotros.
Cuando mis hijos tienen la mente distraída en cosas intrascendentes, me da pena porque no hacen caso a nada más. Están distraídos. Nosotros nos distraemos con cualquier cosa de las cosas de Dios, pero Dios quiere estar con nosotros.
Dios nos habla a través de la Biblia y la oración.y no un rato, sino horas. Podemos orar mientras hacemos cosas, y también orar a solas con Dios en nuestra habitación.
La oración es imprescindible. y además debe ser constante, durante muchas horas de tierna conversación..

2. MARCAR NUESTRAS PRIORIDADES
Nuestra tendencia a perder el norte es infinita. Siempre miramos al dedo en lugar de al horizonte.
¿Cual es nuestra prioridad en la vida? ¿Cual crees que es la prioridad de Pablo en este texto? ¿Por qué viajaba y estaba en la cárcel muchas veces?
Nuestra prioridad debe ser el Reino de Dios. El Reino es justicia, paz y alegría en el Espíritu Santo.
Que no haya nada más importante que el Reino de Dios.
El Reino de Dios es semejante a dos cosas (Lucas 13:18-21): un grano de mostaza y la levadura del pan. El grano se convierte en la más grande de las hortalizas, y la levadura se extiende por tasa la masa y leuda todo el pan.
El Reino de Dios debe estar en toda nuestra vida, en cada tema, en cada asunto, en cada decisión, en cada pensamiento. El Reino de Dios debe ser nuestra única prioridad. Por es necesario horas de oración.

3. PREDICACIÓN DEL EVANGELIO
Dios tiene un objetivo al bendecirnos tanto y darnos salvación. Su objetivo es que todos lleguen a conocer a Jesús y así sean salvo.
Dice 1 Tim. 2.4: "el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad".
Nuestra adoración a Dios debe demostrarse con hechos. No bastan las palabras. De la misma forma, la fe debe debemostrarse con obras, no solo con palabras.
Nosotros somos gente de fe, que hemos conocido a Dios y su poder. Sabemos el poder que hay en el nombre de Jesús.
Por eso hay que llenarse de fe y poder, y empezar a orar y creer, para que se extienda el evangelio. Cuando oramos, cuando tenemos una vida de oración, y tenemos claras nuestras prioridades, entonces estamos preparados para predicar el evangelio de forma sencilla y fructífera.
Dios quiere que nosotros prediquemos el evangelio. Dios nos ama, y por eso nos ha elegido para predicar. Somos sus hijos, y por eso quiere que lo hagamos nosotros, y no otros.
Nuestra ciudad tiene que conocer de Jesús. La enseñanza es que solamente Jesús da salvación. Nuestra vida debe reflejar a Jesús, y entonces predicar que solamente en Jesús hay salvación.

Un abrazo.


EL AVIVAMIENTO Y SUS CONDICIONES PREVIAS (Hechos 1 y 2)

En el libro de Hechos de los Apostoles se nos narra las historia del cristianismo con sus primeros años de extensión. En Pentecostés se produjo el primer Avivamiento del cristianismo, y en el primer capítulo se nos narra las condiciones previas del Avivamiento.

Al principio del primer capítulo, Lucas, el autor del libro de Hechos, hace una llamada al evangelio que escribió con antelación. Lo primero que debes hacer para tener un Avivamiento en tu vida, o en tu Comunidad, es conocer el evangelio. Es lo primero de todo. El verdadero evangelio de Jesús tiene poder para transformar el mundo.

En los siguientes versículos habla de la promesa del Espíritu Santo (vv. 4-11). Las promesas de Dios nos sostienen en tiempos de debilidad o duda. Siempre son extensas en la Biblia y muy numerosas.

La tercera condición previa del Avivamiento es la oración continuada. Esto es importante. Así estaban los apóstoles, reunidos unánimes en oración (v. 14). No basta con orar cinco minutos al día. Dios nos marcará el tiempo necesario. ¿Por qué no una hora? Lo que sí sabemos es que hay que orar sin cesar (1ª Tesalonicenses 5;17). Más oración, más poder, menos oración menos poder.

Aún así a veces hay intentos fallidos. El Avivamiento en nuestra vida o en nuestra Comunidad puede tener varios intentos. Éstos pueden ser necesarios, pero nunca hay que dejar de buscar avivar el evangelio de Dios en nuestra vida y en nuestra iglesia, con compromiso y oración.


EL AVIVAMIENTO EN SÍ
Vemos en el capítulo 2 de Hechos que el Avivamiento empieza con un hecho milagroso (vv. 1-4). Algo hace Dios que cambia las circunstancias a raíz de un determinado hecho que sólo Él se encarga de hacer y provoca el Avivamiento en sí. Hubo un tiempo en el cristianismo europeo del siglo XIX, en el que se negaban los milagros del Nuevo Testamento y todo se reducía a la evolución de mitos antiguos. Aunque hoy en día casi nadie defiende esta posición entre los cristianos, este pensamiento ha calado bastante en el trasfondo del cristianismo europeo y ha llegado a ser un condicionante para la descristianización de Europa. El evangelio ha intentado ser mutilado en algunas partes, sin embargo no ha sido así en España.

Lo que sigue al hecho milagroso es la distribución masiva del evangelio (vv. 5-11). Una ciudad puede ser evangelizada en cuestión de días o semanas. Muchas personas creerán, pero todos escuharán. Ocurrió en Jerusalén  y ha ocurrido en muchas otras ciudades a lo largo de la Historia. Esto no es tan difícil. Cuando una noticia corre de boca en boca, en poco tiempo puede llegar a toda una ciudad, y muchos pueden llegar a creer.

Es entonces cuando hay que tomar medidas concretas y organizar a la iglesia. A los nuevos convertidos habrá que enseñarles todas las cosas y asegurar su desarrollo espiritual. Entonces dará lugar a una Nueva Comunidad (vv. 42-47) que no tendrá nada que ver con lo que había antes.

Dios quiera que podamos vivir estas condiciones previas al Avivamiento, y después lo vivamos en nuestras vidas y en nuestra propia iglesia. Oramos para verlo pronto. Amén.

EL VERDADERO EVANGELIO DE JESUS

Mateo 16:13-28: "Todo que que quiera salvar su vida la perderá, y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará" (versículo 25)

Hoy en día hay tantas iglesias y grupos cristianos, que cada uno predica su propio evangelio. Cada uno hace énfasis en una cosa diferente, pero el verdadero evangelio es el que está en la Biblia. No hay otro. Nunca dejes que te maticen o te cambien la Palbra de Dios. La Biblia dice lo que dice, y esa es la verdad. Es muy fácil y sutil el engaño escondido para apartarse del verdadero evangelio que está en la Biblia. Esto ha pasado varias veces a lo largo de la Historia. En el Siglo XIX, los teólogos liberales alemanes intentaron cambiar el evangelio diciendo que los milagros de Jesús en realidad no existieron. Dijeron que ni siquiera existió Jesús, que no estaba demostrado. Hoy en día, casi nadie admite la teoría de que Jesús no existió, pero en algunos circulos de Europa ha calado esta teoría falsa, y el evangelio se ha debilitado. Las iglesias van desapareciendo poco a poco, y el evangelio está retrocediendo en todo el norte de Europa. Las almas se enfrían espiritualmente, porque han desvirtuado y descafeinado el evangelio. En el Siglo XX, después de las Guerras Mundiales, se predica el evangelio de la prosperidad. Todos quieren tener más dinero y poder. Para ellos, el que más tiene más avanza en el evangelio, y viceversa (el que más avanza en el evangelio más dinero y poder llega a tener). En el Siglo XXI, la época postmoderna, marca un evangelio basado en el placer y el ultra individualismo. Para muchos, estar tranquilo es estar en el evangelio. Para ellos, tener una vida placentera es la recompensa de ser bueno. Lo único importante es el propio yo, y el que está al lado que se apañe como pueda. Esto también es una perversión del evangelio. El verdadero evangelio es el que está en la Biblia, en Mateo, en Marcos, en Lucas, en Juan, y en el resto del Nuevo Testamento. Lo que dice ahí es lo que hay que hacer. Y si yo, u otra persona os predica un evangelio diferente no hagáis caso. Es mentira. El evangelio verdadero está en la Biblia. Los sacamos del texto de Mateo 16:13-28 ¿Cuales son los puntos principales del evangelio que vemos en este texto?

1. LAS RIQUEZAS NO SIRVEN PARA NADA
¿Cuántos textos en la Biblia conoces que hablen en contra de las riquezas? Vamos a ver algunos: El joven rico y Jesús. "Bienaventurados los pobres, porque de ellos es el Reino de los Cielos." (Mateo 5) Santiago 5: "Ricos, llorad por las miserias que os vendrán, porque vuestras riquezas están podridas." "Es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja, que un rico en el reino de los cielos." El ejemplo de Zaqueo: "-Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguien, se lo devuelvo cuadruplicado." 1ª Timoteo 6:17: "A los ricos de este mundo manda qwue no sean altivos ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos y generosos." Santiago 2:5-6: "Hermanos míaos amados, oíd: ¿No ha elegido Dios a los pobres de este mundo, para que sean ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que lo aman? Pero vosotros habéis afrentado al pobre. ¿No os oprimen los ricos y no son ellos los mismos que os arrastran a los tribunales?" Colosenses 3: "Poned la mira en las cosas del cielo, no en las de la tierra" Está claro que no hay que vivir en función de las cosas materiales. No defiendas las cosas materiales. No defiendas el patrimonio de tu familia o de tu iglesia. No le des importancia. Dale importancia al amor, la fe y la misericordia. Lo dice la Biblia. Al que tome de lo que es tuyo, no pidas que te lo devuelva. No luches por la comodidad, sino por el elvangelio. Comparte lo que tienes. Si Dios te da riquezas algún día lo mejor que puedes hacer con ellas es compartirlas y repartirlas.

2. PERDER LA VIDA POR EL EVANGELIO ES UN GOZO
Esto nace del amor. Si entrego mi vida sin tener amor, no sirve de nada, como dice en 1ª Corintios 13. Es difícil creer que perder la vida por el evangelio es un gozo, pero es rigurosamente cierto. No importa que la gente sa desagradecida o engañadora cuando la ayudamos. Es mejor dar que recibir. Jesús entregó su vida por los que le crucificaban. La Biblia dice claramente: el que gane su vida la perderá, el que pierda su vida por causa de Cristo la ganará. Todos los que han entregado grandes posesiones para Cristo, no se arrepintieron, ni se arrepienten de nada. Es un gozo usar lo que tenemos por amor de Cristo. Todos los mártires de la Historia han expresado su profundo y máximo gozo a la hora de entregar la vida, porque hacen lo mismo que Jesús.

3. LO IMPORTANTE ES EL ALMA
Somos personas con alma. Nuestra alma es más importante que las cosas materiales. No te dejes dominar por los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la vanagloria de la vida. Parece que estamos en una sociedad civilizada, pero en los corazones de las personas no ha cambiado nada. Sigue habiendo rencor, venganza, ansias de poder, mucho egoísmo y avaricia. No eheches a perder tu alma. TYrata a tu alma igual de bien que tratas a tu cuerpo. No caigas en cosas vanas, peleas inútiles y discusiones irrevlevantes. Echa fuera de ti el rencor, que es un veneno para el alma. Practica la reconciliación, la restauración y el perdón. No pretendas tener razón. No te hagas sabio en tu propia opinión. NO seas vengativo. Si haces esto cuidarás de tu alma.

4. SE TRIUNFA EN EL CIELO, NO EN LA TIERRA.
Jesús triunfará. No se triunfa en la tierra, se triunfa en el cielo. La gloria de la tierra no sirve para nada. Lo que sirve es la gloria del cielo. La humillación de Jesús, el desastre que tuvo que vivir es su gloria y nuestra gloria. Con la humillación en la tierra se triunfa en el cielo. ¿Qué personas se acercan antes al evangelio? Los pobres, los que lloran, los mansos, los que tienen hambre, los misericordiosos, los de limpio corazón, los pacificaores, y los que padecen persecución, vituperio y tribulación. Si predicas el evangelio a cualquiera de estas personas, ya verás como te escuchan...! Hermanos, es maravilloso predicar el evangelio y que te esuchen. No hay otra cosa mejor en el mundo que ver a un alma convertirse a Jesús delante de ti. Es mejor predicar a este tipo de personas y no a los que son como el joven rico que se acercó a Jesús, los que se auto justifican y se creen que van a ir al cielo por su bondad. Dios nos llama a predicar a los que se cren enfermos del alma, no a los que se creen sanos. Jesús no vino a sanar a sanos sino a enfermos, para salvación. Así pues, hay que huir de los triunfos del mundo, que llevan a la auto exaltación. Es mejor buscar los triunfos en el cielo. HAZTE tesoros en el cielo, no en la tierra.

5. ESTO EMPIEZA YA (versíuculo 28)
¿Porqué introduce Jesús este último versículo? Por la inmediatez de la tarea. Hay que empzar ya, no hay que esperar a mañana. Jesús señala la inminencia de este hecho. Este evangelio ya está entre nosotros, en Alzira, en nuestro barrio, entre nuestros vecions, ESTA EN TI, en la Biblia que es la Preciosa Palabra de Dios. Es el Tesoro Escondido, la Perla Preciosa. El Reino de Dios ya está aquí. No esperamos a ningún otro. Jesús ya vino y nos trajo este evangelio. Hay que practicarlo de corazón. Si no puedes te pasará como a Judas, que ya era tarde cuando se dio cuenta de los que había hecho.

CONCLUSIÓN

El Verdadero Evangelio tiene estas carácteristicas que muchos que se llaman cristianos no aceptan, pero son verdades centrales del Evangelio. Recuerdalas: Las riquezas no sirven para nada. Perder la vida por el Evangelio es un gozo, no un carga. Lo importante es el alma. Se triunfa en el cielo, no en la tierra. Esto empieza ya. Te aniimo a que empiezes ya mismo a vivir el Verdadero Evangelio de Jesús. Dios te bendiga.

CUESTION DE FE

En la Palabra de Dios se habla más de 250 veces sobre la fe. Realmente es un tema central en la Biblia, y especialmente en el Nuevo Testamento.
Leyendo todos los textos donde se habla de la fe, nos podemos dar cuenta de que hay tres conceptos de la palabra fe, que nos pueden ayudar a entenderla. Es la misma fe, pero en tres significados diferentes, que a la vez son inseparables.

1. FE QUE LIBERA
Se refiere a la fe de la que habla Jesús en los cuatro evangelios, necesaria para sanar enfermos o liberar oprimidos. Es la fe que suple necesidades (no caprichos) y que trata de dar gloria a Dios, no al hombre. Esta fe se ve mucho en entornos humildes, donde Dios actúa ante la gran dificultad en las circunstancias de la gente. Esta fe es vista por los poderosos de este mundo como inexistente o engañosa, y buscan dar explicaciones mundanas o supuestamente científicas cuando ven hechos asombrosos que no pueden explicar. Ellos no creen en este concepto de la fe, que usan Jesús (en los evangelios) y los discípulos (en el libro de Hechos de los Apóstoles).
Está definida simple y llanamente en Hebreos 11:1. Esta es la fe que saca a la gente de la depresión, del bajo ánimo y de los problemas de la vida. Esta fe se obtiene creyendo el mensaje de Jesucristo que está en la Palabra de Dios; orando y creyendo.

2. FE QUE SALVA
Este concepto de la fe está descrito por Pablo en el libro de Romanos 3:21-30. Esta es la misma fe que la anterior, aunque muchos intentan separarla del concepto anterior. Es la fe en Jesucristo, que junto con el arrepentimiento de nuestros pecados da la salvación eterna. La prueba de haber adquirido esta fe es una vida entregada a Dios.
Jesús habló de esta fe en Juan 11:25-26: "Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente". Esta fe es la que predicamos para que la gente sea salva. Este concepto de la fe en Jesucristo es la esencia del evangelio que predicamos los cristianos. Es la fe que soluciona el problema de la muerte eterna y aporta salvación al creyente.

3. FE QUE IDENTIFICA
La fe se hizo tan identificativa del pueblo de Dios, que al final se le identifica con este nombre "el pueblo de la fe". De ahí sale un nuevo concepto, el que dice que la fe es el conjunto de creencias que define al pueblo que sigue a Jesucristo, es decir, nuestras creencias, nuestros dogmas. La doctrina de los cristianos es nuestra fe, como conjunto de creencias que nos identifican. No se trata de un cuerpo de reglas restrictivas, como en el Antiguo Testamento, sino una nueva forma de vida que emana del Espíritu Santo, que lleva a los cristianos a seguir al Dios que está en la Biblia, la Palabra de Dios.
Si como cristianos evangélicos somos alguien, es por nuestra fe. Somos un pueblo de fe. Nuestra fe es nuestra fortaleza.

CONCLUSIÓN
Así que estos tres conceptos que manejamos definen a una misma y sola fe: la fe que mueve montañas, que nos hace salvos y que nos da una identidad como pueblo de Dios. Tú puedes aumentar tu fe, leyendo la palabra de Dios y creyéndola. Dios te bendiga.