LA MENTE Y EL CORAZÓN 2



Efesios 4:22-24
 
 "En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está corrompido por los deseos engañosos, renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad."
 
INTRODUCCION
En este pasaje se nos dice cómo podemos renovar nuestros pensamientos y pasar de la persona perdida que éramos antes de conocer a Cristo, para pasar al Nuevo Nacimiento que es tener al Señor Jesús en tu corazón. Ten en cuenta estos tres aspectos sobre la parte que tiene que ver con la mente.
 
1. LOS PENSAMIENTOS LOS ELIGES TÚ
Somos dueños de nuestros pensamientos. Cada uno piensa lo que quiere. La Constitución de España (y seguro que otras Constituciones), dice que todo el mundo tiene libertad de pensamiento. Tu vida y tu destino se marca por tu pensamiento. Tu vida se convierte en lo que crees, en lo que piensas. Creer es un pensamiento. El que cree en Dios, piensa en Dios. El que cree en Jesús piensa en Jesús. Eres lo que piensas.
Si piensas en la Biblia haces lo que dice la Biblia. Si piensas en la Biblia lees la Biblia, y Dios te habla. Romanos 8:5 dice: "Los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu."
 
 
2. LOS CONDICIONANTES EXTERNOS SON LIMITADOS
En un principio, sabemos que hay cosas que influyen en nuestros pensamientos. Aquí tienes algunas:
  • La temperatura.
  • La lluvia o la nieve.
  • La noche o el día.
  • La actividad física.
  • La comida y la bebida.
  • Un accidente.
  • Lo que oímos de las personas que nos hablan.
  • Lo que entra por nuestro ojos. Esto es muy importante porque somos animales visuales.
  • Lo que leemos también es importante.
  • Todo esto son ejemplos de cosas que nos influyen para pensar.
  • La TV también es una cosa que influye en nuestros pensamientos.
Por eso hay que tener en cuenta 2 cosas:
  • Lo que entra en tu cabeza te influye para tus pensamientos. 
  • Nosotros controlamos nuestros pensamientos a través de lo que dejamos entrar en la cabeza.
Por un lado, nosotros decidimos lo que entra y lo que no entra. Por otro lado, nosotros en el ultimo momento también decidimos lo que pensamos.
Por tanto, somos responsables de lo que pensamos. Lo que entra es limitado y lo que pensamos lo decidimos nosotros.
Los psicólogos hacen que tú pienses en cosas que te puedan beneficiar, pero eres tú quien te curas de ciertos pensamientos, no los sicólogos. Solo te será de ayuda si tú quieres pensar lo que ellos te dicen y si funciona, claro.
 
3. CRISTO ES EL OBJETO DE NUESTROS PENSAMIENTOS
Dice 2 Corintios 10:5 que llevemos todo pensamiento cautivo a Cristo. El pensamiento principal de Cristo es vivir con fe. En la vida podemos padecer, sufrir más o menos, pero es la fe lo que nos mantiene de pie. La fe es un pensamiento de confianza o de seguridad en Jesús. Como los pensamientos los fabricamos nosotros, la fe la fabricamos nosotros.
Solo podemos hacer feliz a Dios llevando nuestros pensamientos cautivos a Cristo. Si tenemos fe hacemos feliz a Dios.
Mantén tu pensamiento en Cristo y llegarás a cambiar tu corazón.